La Declaración de Independencia de la Argentina fue una decisión tomada por el Congreso de Tucumán por la cual, el martes 9 de julio de 1816, declaró la formal ruptura de los vínculos de dependencia política de las Provincias Unidas del Río de la Plata con la monarquía española. La declaración fue realizada en la Casa de Tucumán ubicada en la ciudad de San Miguel de Tucumán, donde sesionaba la asamblea. Diez días más tarde, el mismo Congreso renunció también a toda otra dominación extranjera. El acto forma parte del movimiento de independencia hispanoamericana del Imperio Español.
El 9 de Julio evoca la jornada en que un grupo de representantes de las Provincias Unidas confirmó en una declaración su intención de poner fin a siglos de dominio colonial español. La declaración de la independencia fue un acto soberano y colectivo. El histórico Congreso de Tucumán reunió a 28 diputados, que sesionaron y debatieron día a día durante muchos meses para proyectar una nueva nación. Allí se trazaron los primeros lineamientos de lo que luego sería la Argentina.
Cómo sucedió
El Congreso fue convocado cuando la Santa Alianza promovía en Europa la restauración monárquica y combatía los movimientos liberales y democráticos. Comenzó en Tucumán, por el creciente disgusto de los pueblos del interior con Buenos Aires. Desde la supresión de la Junta Grande por el Primer Triunvirato en 1811 y hasta el Directorio de Alvear, la conducción porteña había impuesto sus criterios centralistas, desconociendo las tendencias confederales de la mayoría de esos pueblos. Las provincias fueron convocadas para reunirse en Tucumán y enviaron sus diputados. Estuvieron incluidas algunas del Alto Perú, por entonces en manos realistas, pero no participaron Santa Fe, Corrientes, Entre Ríos y la Banda Oriental, por diferencias políticas. Entre los congresistas predominaba el sentimiento antiporteño. Las sesiones comenzaron el 24 de marzo de 1816, con Álvarez Thomas como Director Supremo, en la casa de doña Francisca Bazán de Laguna, y fueron anunciadas por una salva de 21 cañonazos. Pero pronto Álvarez Thomas renunció, y el 16 de abril fue reemplazado por Antonio González Balcarce, que también renunció. El 3 de mayo, Juan Martín de Pueyrredón, del grupo porteño, fue elegido Director Supremo, con el objetivo de pacificar y unir a todo el territorio.
Los diputados Esteban Agustín Gazcón, Teodoro Sánchez de Bustamante y José Mariano Serrano presentaron un plan aceptado por todos y cuyos puntos fundamentales fueron:
- Comunicarse con todas las provincias para insistir en la necesidad de unión y así enfrentar al enemigo externo.
- Declarar la Independencia.
- Discutir la forma de gobierno más conveniente para las Provincias Unidas.
- Elaborar un proyecto de Constitución.
- Preparar un plan para apoyar y sostener la guerra en defensa propia, proveyendo de armamentos a los ejércitos patriotas.
Tras una serie de medidas y después de arduas discusiones acerca de la forma de gobierno, el 9 de julio de 1816, a pedido del diputado jujeño Teodoro Sánchez de Bustamante, se discutió el proyecto de Declaración de la Independencia. Después de tres meses y medio de sesiones, el Congreso proclamó este día la existencia de una nueva nación libre e independiente de España u otras naciones: las Provincias Unidas de Sud América. El diputado sanjuanino Francisco Narciso de Laprida preguntó: «¿Queréis que las Provincias de la Unión sean una Nación libre e independiente de los reyes de España y su metrópoli?». Todos los diputados contestaron afirmativamente. De inmediato, se labró el Acta de la Emancipación.
Acta de Independencia
En la benemérita y muy digna ciudad de San Miguel de Tucumán a nueve días del mes de julio de 1816: terminada la sesión ordinaria, el Congreso de las Provincias Unidas continuó sus anteriores discusiones sobre el grande, augusto y sagrado objeto de la independencia de los pueblos que lo forman.
Era universal, constante y decidido el clamor del territorio por su emancipación solemne del poder despótico de los reyes de España, los representantes sin embargo consagraron a tan arduo asunto toda la profundidad de sus talentos, la rectitud de sus intenciones e interés que demanda la sanción de la suerte suya, pueblos representados y posteridad.
A su término fueron preguntados ¿Si quieren que las provincias de la Unión fuesen una nación libre e independiente de los reyes de España y su metrópoli?
Aclamaron primeramente llenos de santo ardor de la justicia, y uno a uno reiteraron sucesivamente su unánime y espontáneo decidido voto por la independencia del país, fixando en su virtud la declaración siguiente:
Declaración
Nos los representantes de las Provincias Unidas en Sud América, reunidos en Congreso General, invocando al Eterno que preside al universo, en el nombre y por la autoridad de los pueblos que representamos, protestando al cielo, a las naciones y hombres todos del globo la justicia, que regla nuestros votos, declaramos solemnemente a la faz de la tierra que, es voluntad unánime e indudable de estas provincias romper los violentos vínculos que las ligaban a los reyes de España, recuperar los derechos de que fueron despojadas, e investirse del alto carácter de una nación libre e independiente del rey Fernando VII, sus sucesores y metrópoli.
Quedan en consecuencia de hecho y de derecho con amplio y pleno poder para darse las formas que exija la justicia, e impere el cúmulo de sus actuales circunstancias. Todas y cada una de ellas así lo publican, declaran y ratifican, comprometiéndose por nuestro medio al cumplimiento y sostén de esta su voluntad, bajo el seguro y garantía de sus vidas, haberes y fama.
Comuníquese a quienes corresponda para su publicación, y en obsequio del respeto que se debe a la naciones, detállense en un manifiesto los gravísimos fundamentos impulsivos de esta solemne declaración.
Firmantes del Acta de la Independencia
”Dada en la sala de sesiones, firmada de nuestra mano, sellada con el sello del congreso y refrendada por nuestros diputados secretarios.
Presidente
Francisco Narciso de Laprida, diputado por San Juan
Vicepresidente
Mariano Boedo, diputado por Salta
Secretarios
José Mariano Serrano, diputado por Charcas
Juan José Paso, diputado por Buenos Aires
Diputados por Buenos Aires
Dr. Antonio Sáenz
Dr. José Darregueyra
Dr. Fray Cayetano José Rodríguez
Dr. Pedro Medrano
Dr. Esteban Agustín Gazcón
Tomás Manuel de Anchorena
Diputado por la Provincia de Buenos Aires
Dr. Esteban Agustín Gazcón
Diputados por Catamarca
Dr. Manuel Antonio Acevedo
Dr. José Colombres
Diputados por Córdoba
Eduardo Pérez Bulnes
L. Jerónimo Salguero de Cabrera
José Antonio Cabrera
Diputados por Charcas
Dr. Mariano Sánchez de Loria
Dr. José Severo Malabia
Diputado por Chichas
Dr. José Andrés Pacheco Melo
Diputado por la ciudad y territorio de Jujuy
Dr. Teodoro Sánchez de Bustamante
Diputados por La Rioja
Dr. Pedro Ignacio de Castro Barros,
Diputados por Mendoza
Tomás Godoy Cruz
Dr. Juan Agustín Maza
Diputado de Mizque
Pedro Ignacio Ribera
Diputado por Salta
Dr. José Ignacio de Gorriti
Diputado por San Juan
Fr. Justo Sta. María de Oro
Diputados por Santiago del Estero
Pedro Francisco de Uriarte
Pedro León Gallo
Diputado por Tucumán
Dr. José Ignacio Thames
Diputado por la capital del Tucumán
Dr. Pedro Miguel Aráoz
Por que Argentina es una nación libre